Obispo Salvador Rangel Mendoza: El crimen organizado se está adueñando de municipios enteros en Guerrero
– “Si el gobierno federal no interviene, las cosas van a empeorar”, sostiene
Chilpancingo, Gro.- El obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza dijo este jueves que si el gobierno federal no interviene para establecer control sobre el crimen organizado en Guerrero, las bandas delincuenciales gobernarán municipios enteros.
En entrevista telefónica con el periodista José Cárdenas en Telefórmula, esta noche, el clérigo manifestó que en los hechos el crimen organizado ya se ha adueñado de varios Ayuntamientos de esta entidad, además de que los capos “están llamando” a alcaldes electos el pasado 6 de junio “para hacer algunos arreglos”.
Aseguró que las bandas de delincuentes se están adueñando de los presupuestos municipales, por lo que pidió a la federación su intervención para que eso no suceda.
También refirió que la delincuencia organizada está pidiendo cargos a los alcaldes que a partir del primero de octubre próximo van a encabezar las administraciones municipales.
Rangel Mendoza, originario de Tepalcatepec, Michoacán, lleva ya 6 años como obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa.
Afirmó que el 40 por ciento de los guerrerenses que “quieren entrar a los Estados Unidos de Norteamérica se dedicaban a sembrar amapola” porque esa actividad era sumamente rentable, pero que ahora ya no es ganancia y por eso se van a buscar el sueño americano.
Explicó que hace algunos años el kilogramo de goma de opio tenía un valor de entre 35 y 40 mil pesos, pero que ahora se comercializa ilegalmente en 3 mil pesos, lo que significa que la siembra de ese enervante ya no es rentable y por eso nuestros paisanos prefieren emigrar al país del norte.
Durante la entrevista agregó que el crimen organizado ya controla todo, incluido el comercio, en algunas regiones de Guerrero y advirtió que “si el gobierno federal no ayuda, las cosas van a empeorar”, aun cuando, añadió, “nosotros (se entiende que los sacerdotes católicos) hemos logrado pacificar algunas regiones”.
En un momento de la conversación Rangel Mendoza dijo a José Cárdenas que “en estos momentos estoy en diálogo con ellos”, con alguna banda del crimen organizado que no identificó.
José Cárdenas dijo a Rangel Mendoza que sus declaraciones podrían poner en riesgo su vida, a lo que el sacerdote, de 75 años de edad, contestó que su existencia ya está en peligro desde hace tiempo precisamente porque ha dicho cosas que en nada deben gustar a los criminales. (www.agenciairza.com)