Cierran un edificio gubernamental; exigen construcción de dos escuelas

Berenice Reyes/IRZA
Chilpancingo, Gro.- Ya han transcurrido seis años de los sismos de septiembre del 2017 y desde esa fecha la primaria Rafael Ramírez Castañeda y el jardín de niños Moisés Guevara, ubicados en la colonia Hermenegildo Galeana, en esta capital, no han conseguido su reubicación a una zona segura, por lo que este miércoles padres de familia se volvieron a manifestar y cerraron el edificio de Finanzas del Estado “Juan N. Álvarez”.

Cerraron la entrada del inmueble y bloquearon las calles Ignacio Zaragoza y 16 de septiembre, provocando un gran caos vial, para exigir la intervención de las autoridades municipales y del estado.

Los inmuebles educativos mencionados presentaron daños estructurales desde el 2013, con los fenómenos meteorológicos “Ingrid” y “Manuel”, sin embargo, solo se fueron rehabilitando, y lo mismo ocurrió luego de los sismos de magnitudes superiores en septiembre del 2017.

Autoridades de Protección Civil estatal advirtieron que por encontrase en zona de alto riesgo era necesario su reinstalación. Hace dos años, en el 2021, los 400 alumnos de la primaria, fueron trasladados de manera provisional a una cancha deportiva, motivo por el que han ido desertando.

Así han transcurrido los meses y años, en que los diferentes comités de padres de familia junto con autoridades han buscado la viabilidad de construcción en otro predio, sin que hasta la fecha se haya concretado.

En tanto, son más de 300 alumnos que toman clases de manera provisional en una cancha de futbol en esa misma colonia.

Este miércoles, uno de los manifestantes aseguró que ya se contaba con el terreno pero que ha faltado “voluntad política” para proceder a la construcción del inmueble.

Miguel Ángel Ramos, docente de la primaria, dijo que el problema es que el Instituto Nacional de Vivienda y Suelo Urbano (Invisur), ha reclamado como propios los terrenos en que se realizará la construcción, y fue una donación del Ayuntamiento.

“Esto nos remite al punto de partida, no tenemos el predio donde vamos a construir y eso crea inestabilidad para la comunidad escolar”, aseveró, y agregó que los únicos que se acercaron a la protesta fue personal de la Dirección de Gobernación, a pedirles que levantaran su movimiento, “pero no veo sensibilidad en las autoridades”.

El profesor recordó que se cumplen dos años de que los alumnos toman clases en la cancha de fútbol, en cajas de tráiler y aulas de madera. (www.agenciairza.com)